Marillion y el fracaso de su película sobre el disco Brave

Marillion editaron el disco Brave y pensaron en ilustrarlo con una película. Te contamos por qué fracasó el proyecto.
Tras varios meses grabando el disco en un chateau francés, la banda pensó en grabar una película. Como indica Mark Kelly, el teclista, «habíamos grabado tres vídeos y nos costaron en torno a las 40 000 libras cada uno. Pensamos en invertir todo ese dinero en una película. Teníamos una historia muy buena. Habíamos visto The Wall y la tomamos como ejemplo».
«Tampoco es que tuviéramos un presupuesto demasiado alto, solo 120 000 libras, y elegimos a Richard Stanley como director». El antedicho había trabajado con Public Image Ltd y con Fields of the Nephilim. Sin embargo, fueron sus películas Hardware (1990) y Dust Devil (1992) las que convencieron al grupo.
Pete Trewavas, el bajista, subraya que «era un director que le gustaban los temas más oscuros y encajaba bien con las letras de Brave. En realidad, era un tipo bastante raro. Él tenía un plan en la cabeza y apenas conocíamos algunas ideas que nos había comentado, pero otras se las guardó. Debería habernos dicho qué pensábamos que íbamos a necesitar para terminar el trabajo. Fue curioso, ya que nos trataba como nosotros tratábamos a la discográfica».
En la película se puede ver a la actriz Josie Ayers que va contando la historia narrada en las letras de las canciones a base de flashbacks mientras asiste a una sesión en una psiquiatra. La banda también aparece en algunas escenas.
Lo malo es que la British Board Of Film Classification censuró la película. Kelly reconoce que «al ser un vídeo musical, eran muy estrictos con lo que podían ver los niños. Pensamos que no nos iban a dejar que estrenásemos la película, pero se limitaron a borrar un montón de escenas».
Steve Rothery añade que «hay algunas imágenes muy interesantes y que llegan a hacerte pensar. Tampoco es que fuera a ser una gran película teniendo en cuenta el escaso presupuesto disponible». Kelly concluye que «no era una buena película y que conste que Richard Stanley no podía hacer más con ese dinero. Podría haber sido mejor». ¿Qué opinas tú?
Comentarios cerrados