Aunque sea un estilo musical, es evidente que el flamenco trasciende los límites de este ámbito, haciendo que aquellos que gustan de él lo entiendan más como una filosofía vital. Así, junto al flamenco va asociado, prácticamente desde siempre, el vino, aunque la buena comida tampoco está reñida con él. Prueba de ello es el lanzamiento de Cante y baile en la cocina, un libro de Aurora San José que recoge las mejores recetas de las figuras de este arte.
Hace escasos días se daba a conocer el cartel de la Bienal de Flamenco de Sevilla 2010, que con esta edición cumple ya 30 ofreciendo al público algunas de las mejores propuestas del cante, el baile y el toque en escenarios generalmente privilegiados. Este año no quiere ser una excepción, y lo cierto es que el elenco de artistas elegidos promete, aunque habrá que ver si esas expectativas se cumplen sobre las tablas, lo que se podrá comprobar del 15 de septiembre al 9 de octubre.