Tony Iommi reflexiona sobre el sonido de Black Sabbath

Tony Iommi, guitarra de Black Sabbath, fue apodado, por James Hetfield, «el mercader de riffs». Tanto en las etapas más gloriosas de su banda como en las más oscuras, Tony siempre hizo gala de un particular sonido de guitarra que ahora ha querido comentar en una entrevista.

Sobre 13, el primer disco del grupo que llega al número 1 que además presentarán por Europa en noviembre, indica que «trabajar con Rick Rubin, el productor, ha sido bastante difícil. Teníamos algunas ideas sobre canciones y entonces le llamábamos. Venía, estaba quince minutos y decidía si le gustaba o no. Luego nos hacía repetir la canción de distintas formas y nunca nos decía qué iba a escoger».

Del trabajo de Brad Wilk (RATM) a la batería ha comentado que «en realidad toca como Bill Ward. Otros músicos intentan seguirme pero basándose sólo en el riff o en el acorde mientras que Bill y Brad siempre intentan encontrar ese pequeño detalle que hay que matizar. Eso sí, al no tener tiempo para preparar las canciones optó por tocar de forma distinta en cada ocasión. Esa sensación de jam session ha sido importante también. Brad ha hecho un trabajo excelente».

De su sonido de guitarra indica que «creo que eso de que inventamos el heavy metal tiene mucho que ver con el dramatismo que le imprimimos a nuestra música. Siempre he escuchado material de la vieja escuela y quería mezclar ese dinamismo con lo épico de nuestra música. Mi idea era darle todo el poder posible a los riffs, quería que todo fuera como cuando vas a ver una película de terror donde parece que todo se te viene encima. Quería crear un sonido con esas características». Vaya si lo logró. Grande Iommi.

Vía | Guitar Player

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