Bruce Dickinson habla del problema psiquiátrico de su hijo
Bruce Dickinson ha decidido explayarse tanto sobre el problema psiquiátrico de su hijo como de la prescripción de medicamentos a los niños. «Austin, mi hijo mayor, es hiperactivo. Cuando tenía cinco años, el médico me comentó que le iban a dar Ritalin. Le dije ‘No le voy a dar eso. Tiene cinco años. Es normal para mí. Corre mucho y es activo, pero tiene cinco años'».
«Cuando tenía 11 o 12 años, y muchos de sus compañeros eran disléxicos y grandes chicos, él me dijo ‘¿Puedo ir a ese colegio?’. Le comenté que él no era disléxico. Me dijo ‘soy muy bueno en los deportes, ¿puedo decir que soy dispráxico? Quizá me metan en esa escuela’. Le enviamos para ver qué decían en el colegio. El encargado de hacerle la valoración fue bastante claro».
«Nos preguntó que quién había dicho que era hiperactivo, que lo que estaba era aburrido. ‘Tiene 11 años y habla como si tuviera 21, su razonamiento verbal es increíble’. Me preguntó que cómo era posible ya que nunca le había visto leer un libro. Fui yo el que le indiqué que yo mismo me esforcé para que aprendiera literatura inglesa, para que tuviera una estructura determinada y para que pudiera hablar y escribir bien. Musicalmente es extraordinario».
Es entonces cuando Dickinson reconocía que «no creo en la medicación psiquiátrica para los niños con problemas mentales. En casos extremos puede ser, pero no estoy seguro del todo. ¿Qué hacíamos antes de que hubiera medicamentos? Imagino que les mandábamos a jugar en el bosque y que aprenderían a subirse a los árboles o bien se caían y aprendían».
«Churchill habría sido medicado de forma incuestionable debido a su trastorno bipolar. Muchos líderes del mundo habrían sido medicados. El cerebro de la gente se desarrolla de diversas formas a lo largo de su vida. No es posible saber cómo funciona eso. Es terrible lo que les están haciendo a los niños. Todo parece estar destinado a meter a las personas en categorías para que les sea más fácil clasificarlos«.
De la responsabilidad de ser padre comenta que «podría existir una escuela o algo así, pero no creo que funcionase. Tienes que seguir con tu vida y hacerlo con compasión. Lo importante es que siempre sientan de tu parte un amor incondicional. No importa lo que hagan. No importa lo que hagan. La idea es que sepan que no tienen que hacer algo para que les quieras más ya que tu amor siempre estará ahí. Quizá así dejasen de hacer cosas estúpidas. Estoy orgulloso de mis hijos. Son decentes y eso es lo que siempre quise conseguir». Esperamos tu opinión al respecto de estas declaraciones.
Vía | Blabbermouth
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