Tragedia en el Love Parade

La noticia nos sacudía el pasado sábado, 19 muertos tras una avalancha en un túnel teñían de luto el festival Love Parade que jamás volverá a celebrarse. La ciudad de Duisburgo aún no parece despertar de la pesadilla, el ayuntamiento no quiere reconocer su error y los bomberos avisan de que algo así iba a pasar y de hecho pasó para confirmar que si algo puede ir mal sólo irá peor.

La tragedia también nos toca de cerca, Marta y Clara, dos amigas catalanas que terminaban su etapa de Erasmus acudieron a un festival del que no volverán jamás. Tras comenzar el festival, a las 17.30 horas, en el túnel Karl-Lehr-Strasse se escuchan gritos y cunde el pánico. Los intentos desesperados por salir de una ratonera se convierten en muerte. El recinto cuadruplicaba su aforo y la negligencia es el único testigo de las muertes y de los más de 300 heridos.

Testigos de lo ocurrido comentan que incluso en otras zonas del festival no sabían qué había pasado en el túnel. Una estudiante española comenta que «Eran las ocho y media o las nueve y estábamos bailando tranquilamente, nadie nos informó de lo que pasó. Celébrabamos nuestra fiesta de despedida y a esa hora comenzamos a marcharnos. Comenzamos a recibir mensajes en el móvil preguntándonos si estábamos bien».

«Pasamos dos horas antes por el lugar y estaba vacío. Les pasamos fotos de Marta y Clara a la policía y confirmaron su muerte al día siguiente». Una escalera desbordada, negligencia, la policía que controlaba la entrada, el ayuntamiento que no hizo caso y finalmente la suspensión definitiva de un festival que comenzó en el 89 y que pone así su punto final. Nuestras más sinceras condolencias a las familias de Marta y Clara.

Vía | El Mundo

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